PROLEC-SE es
una batería concebida no sólo para evaluar la comprensión lectora sino, sobre
todo, los distintos procesos cognitivos que se requieren. Así, se distingue
entre problemas de descifrado y problemas de comprensión. Y entre los primeros pueden
encontrarse dificultades sólo con las palabras desconocidas (ruta fonológica) o
también con las palabras conocidas (ruta léxica). En la compresión pueden surgir
dificultades en la capacidad de extraer significados, en la integración de los
significados en la memoria o en la habilidad para hacer inferencias. También
pueden producirse dificultades en el procesamiento de las estructuras sintácticas.
PROLEC (6 a 9 años)
PROLEC-SE (10 a 16 años)
Respecto del reconocimiento de palabras, explicación
más ampliamente sostiene que hay dos procedimientos o rutas que conducen desde
el signo gráfico al significado de las palabras, la ruta léxica y la ruta
fonológica. Un buen lector tiene que tener plenamente desarrollada ambas rutas
si quiere leer todas las palabras, la léxica para leer con mayor rapidez las
palabras familiares y para distinguir los homófonos y la fonológica para leer
palabras desconocidas o poco familiares.
En las edades de 10 a 16 años es muy importante que
los alumnos tengan totalmente automatizado el reconocimiento de palabras, para
poder acceder a procesos de comprensión. De hecho, se producen pocos errores en
los procesos léxicos. Una de las principales diferencias que se observan entre
unos alumnos y otros es la velocidad con la que leen palabras y pseudopalabras.
En general, los alumnos tardan más tiempo en leer pseudopalabras que palabras,
puesto que un gran número de palabras forman parte de su léxico visual y las
leen automáticamente y de forma rápida. No obstante existe un reducido grupo de
alumnos que tarda el mismo tiempo en leer palabras que pseudopalabras. Estos
alumnos están utilizando la ruta fonológica, son lectores lentos y
habitualmente tienen mayores dificultades de comprensión puesto que los
recursos cognitivos son limitados y existe una sobrecarga de la memoria
operativa sobre procesos de descodificación.
La RUTA LÉXICA requiere que el lector sea
capaz de observar y memorizar la secuencia de grafemas que distingue a cada
palabra del resto, algo que depende de la experiencia repetida con esas
palabras escritas. Normalmente esta ruta no necesita de un aprendizaje
sistemático, ya que por el hecho de encontrarse una y otra vez con las mismas
palabras, el sujeto termina por formar una representación mental de la misma.
Sin embargo, algunos alumnos, especialmente los que tienen una memoria visual
pobre, parece que son incapaces de conseguir esas representaciones. Por este
motivo, algunas de las tareas a emplear son similares a las empleadas con los
métodos globales, ya que, en definitiva, lo que el alumno tiene que hacer es
memorizar la forma ortográfica de la palabra. En esta línea el ordenador
constituye un instrumento adecuado al permitir presentar las palabras durante
un tiempo breve y acompañadas de su dibujo o de su pronunciación. Especialmente
estas actividades son necesarias para la enseñanza de las palabras de
ortografía arbitraria, de cara a mejorar la ortografía.
Algunas actividades que se recomiendan son las siguientes:
·
Presentar
simultáneamente dibujos con las palabras que los designan. Ayuda a memorizar
las palabras y las asocien a sus dibujos.
·
Lectura de grupo de
palabras que comparten varias letras.
·
Respecto de las
palabras homófonas, se debe presentar el par de palabras con sus significados
para que el alumno descubra las diferencias y memorice ambas representaciones.
·
Lecturas repetidas.
Este método puede también emplearse usando listas de
frases y palabras, que leerá repetidamente, seleccionadas de un texto que va a
leer posteriormente.
La recuperación de la RUTA FONOLÓGICA requiere actividades más variadas y complejas
ya que esta vía incluye varios procesos distintos que deben ser trabajados de
manera diferente. Son, principalmente, el de segmentación de la palabra en grafemas y el de conversión
de los grafemas en fonemas. Esto
significa que para poder hacer uso de las ruta fonológica el alumno tiene que
saber antes que el habla se segmenta en sonidos y que esos sonidos se pueden
representar mediante letras. De manera que una de las tareas por las que se
debe comenzar para desarrollo de la ruta fonológica es la de segmentar el
habla, o lo que se ha venido a denominar el desarrollo de la conciencia
fonológica. Para el desarrollo de la conciencia fonológica existen en la
actualidad multitud de ejercicios públicos (Carrillo y Carrera, 1993; Jiménez y
Ortiz, 1995; Sánchez, Rueda y Orrantía, 1989; Rueda 1995,etc.) En general se
recomienda seguir una secuencia gradual desde la palabra hasta el fonema
(Hatcher, 1996). Teniendo en cuenta que nuestros alumnos ya tienen experiencia
lectora nos daremos cuenta que la mayoría de los que presentan dificultades en
conciencia fonológica resuelven con facilidad tareas de segmentación léxica y
silábica, siendo las relacionadas con la manipulación de fonemas las que
resultan más complejas. Nuestra recomendación es que las tareas de conocimiento
fonológico se adapten a las características de alumnos para que estas no sean
excesivamente fáciles ni difíciles y además, es muy recomendable utilizar la
escritura con letras de plástico, ordenador...como medio para componer palabras
a las que añade, quita, cambia o recompone letras.
Respecto del aprendizaje de las reglas grafema-fonema, hay que señalar
que ésta es una tarea sumamente arbitraria, puesto que no hay nada en las
letras que indique cómo deben pronunciarse, y por ello es aquí donde se
producen las mayores dificultades. Especialmente en aquellas reglas que
comparten rasgos visuales y fonológicos como la p y la b, la m y la n, la g y
la j, etc. Para el aprendizaje de estas reglas la estrategia más recomendable
es ayudarse de claves que faciliten el establecimiento de algún vínculo entre
letras y los sonidos. Una actividad podría consistir en escribir dos palabras
que compartan alguna letra mediante letras de plástico. El profesor las lee en
voz alta para que el alumno se de cuenta de que dos palabras que tienen letras comunes también tienen sonidos comunes. El profesor hace ver
el sonido de esas letras y después el alumno copia la palabra en su cuaderno
nombrando cada letra a medida que la va escribiendo.
1 comentari:
Avui he passat dues proves d'aquest tipos. En dos casos concrets. És molt enriquidor
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